Thursday, March 7, 2013

Bolsas de plástico y formalismo democrático

Cada vez que un opositor se queja de una norma de la Constitución que no se cumple, una bolsa de plástico arrastrada por el viento es atropellada en la calle Mis Encantos. De un tiempo para acá, tratándose de política prefiero perspectivas realistas a las idealistas o de lo que debe hacerse y ser. La Constitución del 61 funcionó, cuando lo hizo, porque los factores políticos eran contingencia histórica y decidieron adoptar el modelo bipartidista. No es una relación bipartidista la que caracteriza a la de la oposición con el chavismo, sino una relación de tolerancia relativa, mientras más lejos se mantenga su representación política del poder central y de otros poderes. En el capítulo que estamos viviendo la oposición no se ha vuelto contingencia histórica como para meter en el redil constitucional al chavismo. Esto lleva a una lógica de saber escoger las batallas y de hacer ejercicio de contención verbal por las redes sociales. Por ejemplo, la oposición debería trabajar en hacerse orgánicamente más pueblo y pluriclasista con énfasis en lo popular, y resolver así el gran obstáculo de falta de identidad.